Por Javier Orozco
La tentación de los gobiernos por regular los contenidos en los medios de comunicación es tan grande que muchas veces se hace necesario puntualizar los alcances que cada autoridad o actor tiene al respecto.
Sobre el particular, la comisionada Adriana Labardini dijo que el Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) ya trabaja en el diseño de un programa de monitoreo de contenidos, además de los lineamientos de derechos de las audiencias, que se darán a conocer próximamente. Y en efecto: el programa anual de adquisiciones, arrendamientos y servicios 2016, dado a conocer en febrero y modificado en marzo, integra un rubro llamado “sistema de monitoreo de contenidos audiovisuales”, con un monto de 102 millones de pesos.
Sin embargo, la comisionada no puntualizó hasta dónde llegan las facultades del Ifetel en ese rubro; es decir, que solo puede “supervisar que la programación dirigida a la población infantil respete los valores y principios a que se refiere el artículo 3 de la Constitución…”.
En síntesis, el Ifetel no puede sancionar o ejercer la vigilancia de todos los contenidos ni de los rubros que son competencia de otras autoridades, como la clasificación de contenidos que compete exclusivamente a la Secretaría de Gobernación (Segob).
Si para la comisionada Labardini los lineamientos de clasificación emitidos por la Segob son un retroceso, goza de toda la libertad para decirlo, así como existen opiniones contrarias que tienen un panorama más amplio del entorno multiplataforma que se vive y que implica acceso a contenidos sin horario y sin límites; además, debemos tener en cuenta la época en la que estamos.
Al final, lo importante es que exista respeto entre autoridades y una correcta coordinación para el ejercicio de sus atribuciones.
vía Especialistas