Por Javier Orozco
En fechas próximas, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel) convocará a una consulta pública sobre las rebases de licitación de 148 frecuencias de televisión abierta, para que el mercado determine si se configura una cadena nacional, cadenas regionales o una combinación de ambas.
La consulta tiene una peculiaridad significativa, pues el órgano regulador considera la importancia que tiene la penetración de la tv abierta; por ello, para tomar una decisión que atienda tanto al mercado como a lo que la audiencia desea, busca la opinión de expertos posibles interesados y de cualquier ciudadano.
Llama la atención la serie de combinaciones que plantea el Ifetel: no solo una cadena nacional más, sino la posibilidad de atender a mercados y audiencias regionales, y hasta una probable combinación de ambas; en ello mucho tendrán que ver los posibles interesados (inversionistas), porque hacer tv no resulta sencillo ni barato.
El aspecto monetario es un punto medular en esa licitación, no tanto por el efecto recaudatorio que pueda tener para el Estado, sino por la fuerte inversión que harán los ganadores, ya que buena parte de los equipos técnicos se cotiza en dólares, moneda inestable.
Pero lo más importante es la oferta de contenidos, pues además de requerirse también fuertes inversiones — si realmente se quiere competir –, se encuentran las opciones de la tv de paga o los servicios de video sobre demanda, lo cual genera un mercado sumamente competitivo en el que no es fácil entrar.
Por la relevancia de la televisión abierta, este tema generará opiniones divergentes y especulaciones constantes en los siguientes meses, ante lo que se requiere criterio y seriedad.
vía Especialistas