La Asociación Blockchain de México pidió al Banco de México replantear las disposiciones emitidas en la circular 4/2019, en la cual se limita el uso de activos virtuales o criptomonedas, a operaciones internas tanto en las Instituciones de Tecnología Financiera, como de crédito y no hacia el público en general.
Allan Cassis, presidente del Consejo de la Asociación Blockchain de México, consideró que el país se puede convertir en un gran centro de innovación gracias a la tecnología, y al regular las operaciones que se realizan con activos virtuales, o criptomonedas, se puede aprovechar esa oportunidad inigualable.
En conferencia dijo que la Ley Fintech es un gran primer paso que se tiene que aprovechar para tener la ventaja competitiva que significa el fomento de la innovación tecnológica en beneficio de todos los mexicanos.
Estableció que los miembros de la asociación que preside comparten con las autoridades la preocupación por garantizar la seguridad del sistema financiero mexicano y de proteger a sus usuarios, así como de aprovechar el uso de tecnologías innovadoras para promover la eficiencia operativa y la funcionalidad de todo el sistema.
Los activos virtuales, regulados a través de dicha ley, reducen considerablemente los costos de transacción, brindan seguridad a las partes y ofrecen la transparencia tan anhelada y necesitada en México”, consideró.
RETROCESO
Afirmó que limitar el uso de la tecnología subyacente a procesos operativos internos de instituciones calificadas, excluyendo al público en general, podría tener repercusiones importantes en el progreso social y económico de México.
Por eso, expresó que buscarán reuniones con las autoridades federales para exponerles lo importante que es regular las operaciones con monedas virtuales.
Consideró que la misma Ley Fintech advierte que una posible sobrerregulación de este sector podría traer como consecuencia un resultado opuesto al fin que persigue esta nueva legislación, pudiendo dañar el mercado financiero, desincentivando la inclusión financiera y creando barreras para los emprendedores mexicanos y aquellos que deseen optar por operar, como Institución de Tecnología Financiera.
Vivimos en una era de cambios tecnológicos exponenciales. La velocidad a la que se crean nuevos productos y modelos de negocio, y su subsecuente adopción masiva, no tiene precedentes. Nunca habíamos visto este dinamismo en las economías globales y reconocemos que esta situación presenta retos importantes para los reguladores alrededor del mundo, quienes tienen el mandato de proteger sus mercados y a sus usuarios”, puntualizó Allan Cassis.