Por Claudia Juárez Escalona
Los 11 concesionarios de la banda de 2.5 GHz blindaron un año más los 60 MHz que tienen de dicha banda y que dan servicio de TV de paga con tecnología de microondas a mínimo 100,000 usuarios, por lo que tendrán que empezar a dar servicios de datos a más tardar el 1 de enero del 2018.
Los 11 concesionarios de la banda de 2.5 GHz blindaron un año más los 60 MHz que tienen de dicha banda y que dan servicio de TV de paga con tecnología de microondas a mínimo 100,000 usuarios, por lo que tendrán que empezar a dar servicios de datos a más tardar el 1 de enero del 2018.
Con 60 MHz que concentran dichas empresas, de crearse una empresa que operara las frecuencias, éstas tendrían la capacidad de dar servicio de Internet a alta velocidad a 87 ciudades del país, en una primera etapa, con una inversión estimada en 3,000 millones de dólares.
Alejandro Mayagoitia, presidente de la Asociación Nacional de Servicios Inalámbricos de Telecomunicaciones, comentó que “estamos hablando de servicios más sofisticados como el e-México, hablamos de servicios de alta velocidad”.
Dijo que se podría, en una primera etapa de crecimiento, dar cobertura a 87 ciudades y “conforme las cosas vayan mejorando, se alcanzarán mejores precios, el impacto económico de desarrollo pudiera generar ingresos en clases bajas, se podría avanzar. Estimamos que un proyecto así requeriría de un capital de alrededor de 3,000 millones de dólares para los primeros tres años”. El representante de los concesionarios dijo que “es difícil explicar un plan de esa magnitud, es muy técnico, pero requeriría de despliegue de infraestructura, tecnología”.
Ante la complejidad técnica, la necesidad de hacer pruebas de tecnología y migrar a la digitalización, los concesionarios hicieron uso de la única extensión a la fecha límite para el inicio de actividades. De no haberla solicitado, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) habría estado en posibilidad de entrar al rescate de los 60 MHz de las empresas que no explotaran las frecuencias a más tardar el 31 de diciembre de este año.
vía El Economista