Por David Páramo
Algo sucede con el proceso de licitación de la red compartida, puesto que gente que no se equivoca ha cometido dislates que, sin crítica, han sido replicados por otros para intentar generar un doble efecto: no hay suficiente interés en la licitación y el Instituto Federal de Telecomunicaciones está actuando con opacidad.
Parecería que se trata del movimiento de piezas de ajedrez buscando poner en jaque al organismo que encabeza Gabriel Contreras, puesto que parecería que los preponderantes en telecomunicaciones y, en particular, en radiodifusión no están contentos con las medidas que determinó el IFT y que llegarán a una encrucijada a finales del año cuando se hayan agotado los procesos judiciales.
El grupo económico en radiodifusión se siente molesto por las determinaciones de la autoridad, así como por el crecimiento de la competencia. No únicamente por el poderoso crecimiento de su competidor tradicional sino por la entrada de una nueva empresa que, como señalé el lunes, debe hacerlo como un maverick en cuestión de competencia, es decir, ir más allá de la expectativa de los consumidores para generar disrupción en el mercado.
El caso de la red compartida parecería un movimiento para generar reacciones defensivas en la autoridad.
¿ERRORES?
Los sospechosos errores que fueron propalados fueron: Primero. Se hace creer que la licitación corresponde al IFT, cuando quien lleva a cabo el procedimiento es la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
Segundo. Se intentó propalar la mentira de que el organismo encabezado por Contreras actuó con opacidad por no señalar cuántos interesados presentaron solicitud de opinión favorable en materia de competencia ni mucho menos, de quiénes eran.
En ninguna licitación se han hecho públicos estos dos datos al momento de establecer las opiniones en materia de competencia económica. Hay un impedimento jurídico que es totalmente lógico.
Si sólo fueran uno o dos postores se generarían incentivos para que el precio fuera menor o que se diera colusión entre los postores. Cuando se licitaron la tercera y cuarta cadena de televisión abierta no se hubiera dado tanta diferencia entre los dos postores si hubieran conocido que únicamente iban ellos.
Tercero. Que hay desinterés puesto que las bases están mal hechas o algo así, ya que no son totalmente claros en el punto pero parecería que se quieren recargar en la maldición del equipo de Gerardo Ruiz Esparza en el que los retrasos, fallos y hasta licitaciones revertidas han sido una constante.
Es un hecho que no se sabe cuántos postores hay para la red compartida, pero el tema quedará resuelto verdaderamente rápido. Antes o a más tardar el 17 de octubre se conocerá a quienes obtuvieron opinión favorable del IFT y el 20 se presentarán las posturas técnicas y económicas donde ya se conocerá el resultado.
Es deseable que la licitación de la red compartida funcione; sin embargo, sería un grave error que la SCT, que tiene como responsable de este proyecto a Mónica Aspe, lo fuerce en condiciones que no sean las adecuadas.
ABLANDE
Se ha percibido en las últimas semanas, quizá desde la determinación de que UnoTV no es televisión y que por lo tanto Telmex no viola su título de concesión, una suerte de hostilidad en contra del IFT y de sus comisionados que tiene exóticas ramificaciones con la SCT.
Hace unos días el comisionado Adolfo Cuevas dio a conocer un análisis personal en el cual critica el programa de TDT, básicamente diciendo que no fue la mejor alternativa dar televisiones. Nada nuevo, pero sí muy tardío.
Sin entrar en una discusión sobre la metodología o la calidad del análisis, supuestos o conclusiones lo que llama la atención es la reacción que generó entre políticos como el panista Javier Lozanoquien dijo que citaría a comparecer al titular del IFT.
Si alguien tuviera que comparecer por dar televisiones en lugar de bonos, créditos o decodificadores (como señalé en esta columna que hubiera sido deseable) sería el titular de la SCT que buscaba un doble efecto como era la conectividad digital.
Si el tema son las conclusiones del estudio elaborado por Cuevas, pues entonces debería ser ese comisionado del IFT quien debería explicar cómo llegó a esa conclusión tan a toro pasado.
Es necesario mantener atención en lo que parece una escalada en contra del IFT que hasta el momento ha tenido un gran trabajo puesto que ha generado una mayor y mejor competencia.
vía Dinero en Imagen