Por Claudia Juárez Escalona
El consorcio Altán, donde participan Megacable y Axtel, disputará la concesión al grupo encabezado por la estadounidense Rivada; el 4 de noviembre se conocerán las ofertas.
Rivada y Altán son los dos únicos consorcios que participan en la licitación para el despliegue y operación de la Red Compartida, a través de una Asociación Público Privada.
De 21 personas físicas y morales que adquirieron las bases de licitación para la Red Compartida, de las cuales, según la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), había identificado al menos cuatro grupos que reunían las características económicas y financieras para el proyecto, al final sólo dos consorcios están en el proceso.
Altán está integrado por las empresas Isla Guadalupe Investments, Marapendi Holding, Hansam, Corporación Financiera Internacional, CMF Investment Company, Fideicomiso de Administración Número 2431, Fideicomiso Irrevocable de Emisión de Certificados Bursátiles denominado “Fflatam-15-2”, Megacable y Axtel. En tanto, Rivada está formado por Rivada Networks y Spectrum Frontier L.P.
En el evento de presentación de ofertas estuvo Transparencia Mexicana, quien funge como testigo social del concurso; el Órgano Interno de Control (OIC) de la SCT, dos fedatarios públicos y diversos observadores acreditados conforme a las bases del concurso.
En las ofertas técnicas, los interesados deberán demostrar capacidad legal, administrativa, técnica y de gestión, mientras que en la oferta económica tendrán que mostrar capacidad económica y financiera. Aunado a los sobres de propuestas técnicas y económicas, los concursantes deberán presentar una garantía de seriedad de 1,000 millones de pesos.
En dicha sociedad el gobierno aportará en arrendamiento 90 MHz de la banda de 700 MHz y un par de hilos de fibra de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), mientras que el ganador tendrá que realizar una inversión de 7,000 millones de dólares y cumplir compromisos de cobertura superiores a 85% de la población nacional.
Lo que resta de la ruta
La presentación de propuestas y apertura de ofertas técnicas fue el primero de tres eventos públicos mediante los cuales se realizará la recepción, evaluación y fallo respecto de las propuestas que serán entregadas por los concursantes. El siguiente evento se llevará a cabo el próximo 4 de noviembre con el dictamen de las ofertas técnicas y la apertura de las ofertas económicas.
La tercera fase será el 17 de noviembre, cuando se dé el dictamen de las ofertas económicas, se abran las propuestas de cobertura de cada concursante y se anuncie el fallo y adjudicación del concurso al participante que haya ofrecido la mayor cobertura.
Jesús Romo, analista de Telconomia, dijo que “no necesariamente hay un conflicto de interés si participan prestadores de servicio con operaciones en México (en referencia a Axtel y Megacable). Este tipo de competidores, dijo, quedaba obligado a formar un consorcio y pasar la opinión del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) en cuanto a la conformación del mismo, de manera que los prestadores de servicio no tengan influencia suficiente como para vulnerar la operación de la Red Compartida como un agente mayorista.
En cuanto a Rivada, Romo dijo que, por el tipo de reglas, uno de los perfiles más obvios era la entrada de una empresa de telecomunicaciones sin operaciones en México, pues este perfil tiene menos problemas a la hora de pasar el filtro del IFT en cuanto a opinión de competencia.
El especialista destacó que hay incentivos para que el desarrollador pueda invertir, como el precio del espectro (más bajo que otras bandas) y la capacidad de usar infraestructura existente.
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vía El Economista
