Por Maricarmen Cortés
El presidente de la Condusef, Mario di Costanzo ha alertado varias veces sobre la necesidad de que se regule el crowdfunding en México, que está creciendo a pasos agigantados en los últimos meses y que registró ya el primer fraude con el proyecto de Foodies, a través de Fondeadora MX, que es la plataforma más grande para financiar una gran cantidad de proyectos: desde empresas startups hasta cortometrajes universitarios, y que se queda con una comisión de la recaudación.
No hay en efecto ninguna regulación, los fondos se recaudan a través de las distintas plataformas en las que se establece una meta de recaudación por un tiempo limitado y a cambio los donadores reciben todo tipo de recompensas, que varían de acuerdo al proyecto financiado y al monto aportado.
Es desde luego una inversión de alto riesgo porque no hay absolutamente ninguna garantía de que el proyecto se realizará, de que los recursos se manejarán adecuadamente ni tampoco del manejo de datos personales, porque todo se realiza a través del internet y las aportaciones se pagan con tarjeta de crédito.
No faltó mucho para que se cometiera el primer fraude con un proyecto que parecía muy prometedor: Foodies, una empresa de reparto de comida que tenía como cabeza a Miguel, Mick Islas, que evidentemente no ha dado la cara. La meta inicial era recaudar 500 mil pesos y la superó con creces, ya que en total captó 963 mil 202 pesos y defraudó a los 189 fondeadores, a quienes había prometido una recompensa de una camiseta a quienes aportaban 100 pesos, hasta el 1% de participación accionaria a quienes aportaron más de 20 mil pesos.
Fondeadora no se está cruzando de brazos. Presentó ya una denuncia penal y ofrece a los fondeadores asesoría legal para que puedan recuperar su inversión, pero desde luego no hay ningún compromiso de devolución del dinero, y las autoridades financieras no pueden intervenir a pesar de que hubo captación de dinero del público porque es una actividad no regulada, y un negocio entre particulares.
La Condusef tampoco puede hacer nada porque no son intermediarios financieros, aunque Di Costanzo ya dijo que también ofrecerá asesoría gratuita a los afectados.
Hay desde luego voces que se oponen a una regulación por parte de las autoridades financieras porque el crowdfunding se basa en la autorregulación. Yo soy de la idea de que sí debe haber una regulación y que las plataformas como Fondeadora deberían ser corresponsables en caso de un fraude como Foodies porque en principio son las responsables de analizar los proyectos.
Y el crecimiento del crowdfunding debería ser también para los bancos e intermediarios financieros una oportunidad para participar en este mercado porque es evidente que para muchas startups es la mejor forma para financiarse.
RED COMPARTIDA, Y SIGUE EL MISTERIO
La licitación de la red compartida, uno de los proyectos más importantes de la SCT, será una de las más oscuras de este sexenio. Habrá que esperar al próximo jueves 20 para conocer cuáles son las empresas que participan porque tanto la SCT como el IFT insisten en matener el misterio. El IFT, que preside Gabriel Contreras, informó ayer que emitió ya su opinión en materia de competencia económica de los consorcios interesados en la Red Compartida y ayer les fue notificada la opinión.
El IFT no dice ni cuántas empresas ni mucho menos revela sus nombres, aunque se afirma que son Rivada Networks y el grupo que encabeza el estadunidense Sol Trujillo.
Lo que resulta de Ripley es que el IFT justifica la reserva de los nombres, acorde a las “disposiciones en materia de transparencia y acceso a la información pública”. Y lo que se afirma es que el misterio se debe a que será hasta el jueves cuando se presenten las ofertas técnicas y es factible que sólo haya realmente un grupo interesado, aunque el comunicado del IFT habla en plural de “consorcios interesados”.
PEPSICO, VENDERÁ BEBIDAS CON MENOS AZÚCAR
Pepsico reaccionó ya ante la recomendación de un Comité de la OMS de aplicar un impuesto de 20% a las bebidas azucaradas. Al anunciar en Estados Unidos su agenda de sustentabilidad para 2025, se compromete a reducir el contenido de azúcar de sus bebidas para que tengan menos de 100 calorías por cada 12 oz. y una mayor promoción de los productos de cero calorías.
vía Dinero en Imagen
