Por Ivet Rodríguez
El negocio de LoJack es contra reloj. Esta empresa dedicada al rastreo y recuperación de vehículos robados tiene en promedio dos horas para ubicar una unidad antes de que sea desmantelada o puesta en alguna madrina hacia Centroamérica.
LoJack tarda en promedio hora y media en localizar un auto robado, el tiempo era mayor en zonas de dificil acceso o en la noche. Para reducir el tiempo de localización, la firma decidió utilizar drones.
“En abril firmamos una alianza con Dronix que nos dará acceso a seis drones”, dijo Leonardo Contreras, director general de LoJack.
Los drones de ocho hélices tienen una autonomía promedio de 20 minutos y están equipados con computadoras de rastreo.
Una vez que se emita la llamada de localización de LoJack, Dronix activará su dispositivo (que incluye una antena que permitirá monitorear el código del auto robado) y partirá desde sus torres de control colocadas en zonas de alta incidencia como Ciudad Netzahualcóyotl, Ecatepec, Vallejo, Naucalpan, Iztapalapa, Tepito.
Desde su llegada a México en 1998, LoJack ha instalado medio millón de dispositivos de radiofrecuencia en el país, en todo tipo de vehículos. Según estadísticas de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), 55% de los autos robados en México son modelos del año y 45% tienen tres años o más.
LoJack realiza el rastreo vía radiofrecuencia. “Contamos con una concesión federal para operar una frecuencia en el espectro radioeléctrico. Esto nos permite localizar unidades aún en sitios donde no llega la señal de GPS”, dijo Contreras.
La firma tiene un índice de recuperación de 90%. Desde 1998 ha devuelto 17,000 unidades robadas a sus dueños.
Vía Expansión