Por: Maricarmen Cortés
Muchas radiodifusoras, sobre todo las de menor tamaño, se negaron a un mayor incremento salarial ante la incertidumbre jurídica por los lineamientos del IFT.
La renovación salarial de las más de mil 200 emisoras de radio y televisión que están afiliadas a la CIRT fue realmente muy compleja y, por vez primera en su historia, tuvieron que aprobar una prórroga en las negociaciones para que no estallara la huelga el 31 de enero.
El problema fue que muchas radiodifusoras, sobre todo las de menor tamaño, se negaron a un mayor incremento salarial ante la gran incertidumbre jurídica que representan para la industria, en especial para la radio, los lineamientos del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) sobre derechos de audiencia.
De hecho, no fue posible avanzar en las negociaciones con el IFT, organismo regulador del sector de telecomunicaciones, hasta que se emitió la resolución del pleno —que también muy reñida— de aplazar la entrada en vigor de los polémicos lineamientos hasta el próximo 16 de agosto.
En un comunicado conjunto con los tres sindicatos del sector: SIEMART, SITATYR, STIRTT y la CIRT informaron que se evitó la huelga y llegaron a un acuerdo interesante porque habrá dos aumentos salariales en el año. El primero, de 4.1% y el segundo de sólo 0.4% a partir de julio próximo. Se reconoce así el impacto de una mayor inflación en este arranque de año, pero repartido con el segundo aumento.
En su comunicado, empresas y sindicatos critican los lineamientos del IFT; se manifiestan a favor de trabajar con los comisionados del IFT en cualquier asunto que se requiera, de no retroceder en temas fundamentales, como la defensa de la libertad de expresión e información, y se comprometen a seguir “con detenimiento” el proceso judicial- legislativo por las dos controversias contra los lineamientos presentadas ante la SCJN por la Presidencia de la República y el Senado.
DIVISIÓN EN IFT SOBRE PRÓRROGA
Y se esperaba que después de las dos controversias constitucionales interpuestas por la Presidencia de la República, el pleno del IFT resolviera en forma unánime la prórroga de la entrada en vigor de sus lineamientos en espera de la resolución de la SCJN y de las múltiples críticas hacia medidas que, en la práctica, sí atentan contra la libertad de expresión y que serían imposibles de cumplir, como en un programa de radio diferenciar lo que es una opinión de una información.
Sin embargo, sorprendió que la votación fue muy reñida: tres votos en contra de la prórroga y tres a favor. La mayoría de las resoluciones del pleno del IFT se toman por mayoría y no es común un voto de cuatro a tres.
Lo que sorprendió aún más es que Adolfo Cuevas, el único comisionado que votó en contra de los lineamientos, votó en contra de la prórroga junto con las comisionadas Adriana Labardini y Elena Estavillo, a quienes se consideran como las “madrinas” de los lineamientos y más firmes defensoras, con el argumento de que el IFT está obligado a cumplir la ley y emitirlos.
Por parte de los cuatro comisionados que votaron a favor, incluido el presidente del IFT, Gabriel Contreras, no sorprende su voto porque ante las controversias presentadas, lo sensato era esperar a la resolución de la SCJN.
La renovación salarial de las más de mil 200 emisoras de radio y televisión que están afiliadas a la CIRT fue realmente muy compleja y, por vez primera en su historia, tuvieron que aprobar una prórroga en las negociaciones para que no estallara la huelga el 31 de enero.
El problema fue que muchas radiodifusoras, sobre todo las de menor tamaño, se negaron a un mayor incremento salarial ante la gran incertidumbre jurídica que representan para la industria, en especial para la radio, los lineamientos del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) sobre derechos de audiencia.
De hecho, no fue posible avanzar en las negociaciones con el IFT, organismo regulador del sector de telecomunicaciones, hasta que se emitió la resolución del pleno —que también muy reñida— de aplazar la entrada en vigor de los polémicos lineamientos hasta el próximo 16 de agosto.
En un comunicado conjunto con los tres sindicatos del sector: SIEMART, SITATYR, STIRTT y la CIRT informaron que se evitó la huelga y llegaron a un acuerdo interesante porque habrá dos aumentos salariales en el año. El primero, de 4.1% y el segundo de sólo 0.4% a partir de julio próximo. Se reconoce así el impacto de una mayor inflación en este arranque de año, pero repartido con el segundo aumento.
En su comunicado, empresas y sindicatos critican los lineamientos del IFT; se manifiestan a favor de trabajar con los comisionados del IFT en cualquier asunto que se requiera, de no retroceder en temas fundamentales, como la defensa de la libertad de expresión e información, y se comprometen a seguir “con detenimiento” el proceso judicial- legislativo por las dos controversias contra los lineamientos presentadas ante la SCJN por la Presidencia de la República y el Senado.
DIVISIÓN EN IFT SOBRE PRÓRROGA
Y se esperaba que después de las dos controversias constitucionales interpuestas por la Presidencia de la República, el pleno del IFT resolviera en forma unánime la prórroga de la entrada en vigor de sus lineamientos en espera de la resolución de la SCJN y de las múltiples críticas hacia medidas que, en la práctica, sí atentan contra la libertad de expresión y que serían imposibles de cumplir, como en un programa de radio diferenciar lo que es una opinión de una información.
Sin embargo, sorprendió que la votación fue muy reñida: tres votos en contra de la prórroga y tres a favor. La mayoría de las resoluciones del pleno del IFT se toman por mayoría y no es común un voto de cuatro a tres.
Lo que sorprendió aún más es que Adolfo Cuevas, el único comisionado que votó en contra de los lineamientos, votó en contra de la prórroga junto con las comisionadas Adriana Labardini y Elena Estavillo, a quienes se consideran como las “madrinas” de los lineamientos y más firmes defensoras, con el argumento de que el IFT está obligado a cumplir la ley y emitirlos.
Por parte de los cuatro comisionados que votaron a favor, incluido el presidente del IFT, Gabriel Contreras, no sorprende su voto porque ante las controversias presentadas, lo sensato era esperar a la resolución de la SCJN.
Vía: Dinero en Imagen