Por: Nicolás A. Lucas.
LA PRESIDENCIA Y EL SENADO ABREN UN PULSO CONTRA EL IFT EN LA CORTE.
Los comisionados del IFT tuvieron el 1 de febrero una reunión de urgencia para discutir sobre dos controversias constitucionales de la Presidencia de la República y el Senado que cuestionan sus facultades de regulación de contenidos y en la que se conoció un proyecto para no continuar con 3 artículos de los Lineamientos de las Audiencias.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones se planteó el miércoles 1 de febrero la posibilidad de mantener en pie la publicación de los Lineamientos de las Audiencias para el día 16 como lo había contemplado desde el 21 de diciembre de 2016, pero con la reserva de no ejecutar el contenido de tres fracciones particulares de tres artículos de esos lineamientos que se componen de siete títulos generales, 72 artículos y una serie más de anexos y artículos transitorios.
Los Artículos 2, en sus fracciones XXVII y XXXVII, y los artículos 15 y 46, en sus fracciones VIII, estuvieron en el centro de la discusiónde los comisionados en esa sesión extraordinaria en la que al final el pleno definió, con tres votos en contra y cuatro a favor, postergar seis meses, hasta el 16 de agosto, la entrada en vigor de esos mecanismos de regulación de transmisión de contenidos en radio y TV, en tanto la Suprema Corte de Justicia de la Nación resuelve dos controversias presentadas por el Senado y el Ejecutivo sobre la facultad del IFT de regular en la materia.
El proyecto tenía como fin el de diferir la aplicación particular de esos artículos, que en la práctica obligan a los concesionarios a informar a las audiencias cuando un contenido se trata de una opinión o de una información noticiosa.
Estos han sido los artículos que mayor polémica han levantado entre los analistas y los actores de la industria, quienes por un lado afirman que se trata de un principio de coartación a la libertad de expresión y por el otro, de una protección a las audiencias en los contenidos que reciben.
Los siete comisionados que integran el pleno del IFT coincidieron en que el proyecto trataba de conciliar, en tanto se conocía la decisión de la Suprema Corte, los intereses de la industria con los de las audiencias. Y consintieron también en que los lineamientos, como se publicaron en el Diario Oficial de la Federación el 21 de diciembre anterior, fueron diseñados con base las facultades que la legislación concede al regulador, por lo que el IFT no ha ido más allá de lo que le ordena la Constitución.
Pero dar paso al proyecto hubiera significado abrir la puerta a otros escenarios desconocidos en materia jurídica; el IFT, incluso, habría entrado en “terreno peligroso” porque lo que la dependencia intenta regular resulta “novedoso” en la legislación y en el mercado mexicano de la radio y la televisión en abierto y restringido.
Tampoco dieron paso al proyecto, porque, hasta ese día, el Instituto Federal de Telecomunicaciones no había sido informado de cuáles son los ocho artículos de la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión (LFTR) que la Presidencia de la República llevó como fundamento de su argumento en la controversia constitucional que presentó la semana pasada en la Suprema Corte.
El proyecto, al final, fue desechado por seis de los siete comisionados. Y en el punto de diferir la publicación de los Lineamientos de las Audiencias para el 16 de agosto fue avalado por los comisionados Javier Juárez, Gabriel Contreras, Mario Fromow y Ernesto Estrada; en contra votaron los comisionados Adriana Labardini, María Elena Estavillo y Adolfo Cuevas.
A favor de la postergación estuvo el argumento de que el poder judicial definiría en definitiva las facultades del IFT sobre regulaciones en transmisión de contenidos:
“De ninguna manera estos lineamientos violan algún derecho humano o incluye alguna medida que limite la libertad de expresión. No nos estamos retractando o debilitando, si acudimos a la Corte a defender en el terreno legal los lineamientos generales sobre la defensa de las audiencias”, dijo entonces el comisionado Juárez Mojica. “La eficacia de su aplicación requiere que se despejen las dudas sobre una posible invasión de facultades o vulneración de derechos humanos que han planteado la Presidencia y el Senado”, defendió el comisionado Ernesto Estrada
Los comisionados defendieron las facultades del Instituto para marchar con los lineamientos para el día 16 de febrero, pues citaron como ejemplo que en lo que se definía la Controversia Constitucional 117/2014, el IFT pudo proseguir con sus objetivos de la portabilidad numérica.
Sin embargo, el regulador debe estar abierto a la pluralidad y en ese sentido “no se quiere decir que lo que escribimos está en piedra y nunca se va a modificar”, expuso la comisionada María Elena Estavillo. “Debemos prepararnos para lo que puede ser una sentencia que nos obligue a expedir unos lineamientos modificados y no una sentencia que nos arrebate facultades”, reflexionó a su vez el comisionado Adolfo Cuevas.
Prácticamente todos los comisionados aceptaron ese día en que el IFT ha sido objeto de escarnio y de la presión mediática, pero que ello no debe vulnerar la autonomía del regulador. “Digan lo que digan los medios, nos denosten, nos humillen e insulten, nunca hubiera aprobado yo unos lineamientos que tuvieran el menor viso de censura o de violación de derechos humanos”, dijo Adriana Labardini.
“No podría asegurar que hubo algún tipo de guion que se repartió entre los comunicadores para expresar algún punto de vista, pero hay muchas coincidencias en muchos de ellos”, remató el comisionado Mario Germán Fromow.
Vía: El Economista