Por: Erendira Espinoza
A pesar de que el consumo de tabaco está disminuyendo, se calcula que en 2020 habrá más de mil millones de fumadores en todo el mundo.
Philip Morris International (PMI) decidió cambiar de paradigma en la industria cigarrera, por lo que su plan de largo plazo es dejar de vender cigarrillos y ofrecer un dispositivo llamado iQOS, mejor conocido como el tabaco sin humo y que promete generar menos efectos dañinos para la salud.
“Ésto es un cambio de paradigma, una transformación completa de nuestro negocio”, dijo Gonzalo Salafranca, director de asuntos públicos de la compañía en nuestro país.
TIEMPOS DIFÍCILES
Para la dueña de la marca Marlboro, los últimos años han sido difíciles para la industria, pues en varios países se implementaron normas para disminuir el consumo de cigarro entre la población.
Así, frente a una disminución en las ventas de cigarrillos, la compañía decidió invertir más de tres mil millones de dólares en el desarrollo de un dispositivo que evita la combustión del tabaco y con ello reduce la liberación de sustancias tóxicas, y es que, según datos de PMI, para 2020 todavía habrá más de mil millones de fumadores en el mundo, potenciales clientes para su nuevo dispositivo.
“Con esto queremos reemplazar paulatinamente nuestros productos actuales. Esa es la apuesta de la empresa, firme y clara, y que no tiene marcha atrás. Es un compromiso firme de migrar nuestro modelo de negocio actual a un nuevo modelo, estamos hablando de un cambio de paradigma, estamos hablando de movernos a un negocio radicalmente distinto, que se da gracias a la innovación”, dijo Salafranca.
El dispositivo se denomina iQOS, consiste en un pequeño cargador que guarda en su interior una especie de cigarro electrónico, al cual se agrega un cartucho de tabaco, disponible en una pequeña cajetilla bajo la marca Heets.
“En lugar de quemar el tabaco, lo calienta, se controla el calentamiento, de esta forma se eliminan muchos de los componentes nocivos”, afirmó el ejecutivo.
Actualmente iQOS está disponible sólo en 20 países y se espera que en algún momento llegue a México, aunque todavía no hay una fecha definida.
“Aún no sabemos en cuanto tiempo, pero es un hecho que llegará al mercado. No lo estamos probando, sabemos que funciona. Esto no es un producto para dejar de fumar, es para aquellos que quieren seguir haciéndolo pero con menor efecto a la salud”, expuso.
De acuerdo con Salafranca “México, por su tamaño, es un mercado importante. La misión es convertir en un momento determinado a todos los fumadores a cualquier alternativa de las que estamos trabajando”.
COMERCIALIZACIÓN
El producto se lanzó en 2014 en Japón e Italia, donde según Salafranca tuvo buena aceptación por parte de los clientes, baste señalar que actualmente hay un millón 600 mil personas usando iQOS.
El lanzamiento implicó cambios al interior de la compañía, pues además de que se invirtieron 500 millones de euros en una fábrica en Italia, recientemente, PMI anunció la reconversión de una planta de cigarrillos en Grecia, para que se enfoque a la elaboración de los consumibles de iQOS, medida valuada en 300 millones de euros.
Vía: Dinero en Imagen