Por: Redacción
El emprendedor Peter Bloom afirma que todos tienen derecho a sumarse a la cobertura celular.
La geografía de México provoca que llevar conectividad a todos los rincones del país sea complicado y con altos costos, y que, particularmente, las zonas indígenas sean las más afectadas por esta situación, algo que el emprendedor Peter Bloom quiere cambiar con la asociación Telecomunicaciones Indígenas Comunitarias.
La idea surgió cuando estábamos trabajando con las comunidades y nos dimos cuenta que no tenían cobertura celular o, en general, sí había, pero era muy cara o a veces no funcionaba. Por eso comenzamos a practicar con tecnologías de bajo costo y código abierto para crear una red comunitaria”, relató en entrevista con Excélsior.
Una vez resuelto el tipo de tecnología que se puede usar, la asociación creada por Bloom impulsa a las comunidades a involucrarse. De hecho, las asambleas locales son quienes deciden entrar en la asociación, los gobiernos municipales aportan los recursos para adquirir la infraestructura y las personas de la localidad la administran.
El emprendedor detalló que la inversión inicial para implementar estas redes de celular comunitarias es de 180 mil a 300 mil pesos, ya que los equipos cuestan entre 150 mil a 200 mil pesos, y a dicho monto se le añaden los arreglos que se tengan que hacer en el sitio donde estarán.
Una vez lista la red, se ofrece el servicio para hacer y recibir llamadas dentro de la localidad por una membresía mensual cercana a 40 pesos, y para hacer llamadas de larga distancia se necesita una especie de recarga.
De esta manera, las comunidades con menos de cinco mil habitantes son dueñas y administran el servicio, por lo que 62.5 por ciento de las cuotas se quedan en la localidad y ayudan a seguir impulsando la red, mientras que el resto lo recibe la asociación para seguir creciendo.
Todo esto es posible gracias a que Telecomunicaciones Indígenas Comunitarias logró la primera concesión social para administración y operar redes de telecomunicaciones y radiodifusión autónomas en Oaxaca, Chiapas, Veracruz, Puebla y Guerrero.
El futuro
Bloom indicó que actualmente han instalado redes en más de 20 comunidades en Oaxaca, por lo que el siguiente paso es ampliar los servicios y su presencia en México.
Tenemos una concesión que nos permite trabajar fuera de Oaxaca, y acabamos de obtener un premio que podemos usar para expandir nuestras operaciones a otros estados y modificar un poco el modelo para escalarlo”, dijo.
Para lograrlo, ampliarán su equipo y se acercarán a las otras comunidades que se han contactado con ellos, pero que hasta ahora no habían podido ayudar.
Afortunadamente su trabajo en Oaxaca ya les ha mostrado qué tipo de retos pueden encontrar, como cuestiones meteorológicas, la disponibilidad de la red eléctrica o la forma en que están organizadas las comunidades.
Indicó que la otra meta es ofrecer no sólo llamadas, también hay interés en ampliar el servicio a datos móviles para que esas comunidades tengan acceso a internet.
Está en el plan a futuro, hay mucha demanda de las comunidades para datos móviles y técnicamente hablando no hay nada que nos detenga. Pero tenemos que hablar bien con las comunidades sobre cómo sería el modelo, hacerlo sostenible y a qué tipo de contenido se accedería”, comentó.
Bloom añadió que su modelo ha servido de ejemplo para “proyectos hermanos” a los que han asesorado en otros países como Nicaragua, Colombia y Brasil.
Actualmente su proyecto fue elegido como uno de los finalistas del país del Desafío Google.org, y necesita los votos de las personas para convertirse en el representante de México para ir a la final regional el 16 de noviembre.
Vía: Dinero en Imagen