Por: Redacción
No sólo es para extender su alcance.
Los teléfonos fijos (siguen existiendo), son aparatos que facilitan la vida de las personas. Si son utilizados con frecuencia, reducen el costo del uso de su servicio, pues cada llamada es más barata que una realizada a través de un celular.
Si todavía los utilizas, seguramente te son familiares esos cables en espiral que muchos utilizan para jugar mientras realizan una llamada.
A la larga se enredan y generan problemas, sobre todo para aquellos amantes del orden. Esas personas en particular se preguntarán a quién se le ocurrió este diseño, ¿son sólo para extender su rango de alcance si necesitamos alejarnos del aparato?
No.
Aunque ese es su principal uso, existe una segunda razón más importante que explica este peculiar diseño: Evitan un fenómeno llamado diafonía en las telecomunicaciones.
¿Qué es la diafonía?
Es un fenómeno que se produce cuando dos señales de comunicación se acoplan (o enciman), lo que ensucia la calidad de señal entre los interlocutores. Esta situación dificulta una comunicación de calidad, pues otras señales similares podrían interferir con tu plática.
Otras señales electromagnéticas (como la del horno de microondas) podrían afectar la recepción y emisión de sonido.
Aunque en la actualidad la probabilidad de que esto ocurra es remota, el uso de cables trenzados es justo para evitar esta posibilidad. Este tipo de cables evita interferencia o acoplamiento de sonidos.
Gracias a ellos, puedes escuchar a la otra persona, sin mayor interrupción.
Vía: Dinero en Imagen