Por: Redacción
Un drama que incluya adolescentes, irreverencia, psicopatía, amor, amistad y diálogos inteligentes puede ser muy adictivo y, The End of the F***ing World, la nueva serie de Netflix, tiene cada uno de estos elementos y un poquito más. En otras palabras, si ya se te acabó Dark, The Sinner, Jessica Jones, Mindhunter o cualquier producción original de Netflix, no hay falla: esta nueva serie es la correcta.
Si todavía no se la creen o simplemente no les convence el mismo actor de “Shut up and Dance” de Black Mirror, entonces han de saber que los que ya la vieron le han puesto un 100 redondo en Rotten Tomatoes. Igualito a Lady Bird de Greta Gerwig, la película que durante un rato fue la mejor calificada de la historia.
Esta serie está basada en un cómic medio chafa (gráficamente hablando) que retrata el viaje sin regreso de dos pubers de 17 años: uno, James, que cree es un psicópata sin remedio y otro, Alyssa, tiene problemas familiares reales y de adaptación. Los personajes indicados para convertirse en una de las comedias negras más aplaudidas del año en el que se involucra la muerte, la miseria humana, el acoso y, nuevamente, el amor.
Con una duración corta, pero perfecta, de ocho capítulos (algunos medio gore) de 20 minutos, The End of the F***ing World tiene bien merecida esta calificación por la historia, la narrativa, las increíbles actuaciones de Jessica Barden y Alex Lawther y el twist que le da un tono inesperado… todo.
Vía: Dinero en Imagen