Por: Redacción
El cuidado de estas áreas es fundamental para mitigar algunos de los daños causados por el calentamiento global.
Especialistas del Instituto Politécnico Nacional (IPN) utilizan drones y cámaras multiespectrales para analizar la estructura de los árboles y su contenido de carbono, además de cuantificar cambios en la vegetación, con lo cual contribuyen a la preservación de los bosques.
El cuidado de estas áreas es fundamental para mitigar algunos de los daños causados por el calentamiento global, por lo que se busca proporcionar las herramientas que permitan a los dueños de las tierras recibir un estímulo por no cortar sus árboles, lo cual se conoce como bonos de carbono, señaló el investigador Joaquín Salas.
“Lo que pretendemos es cuantificar de forma rápida y económica cuánto carbono forestal hay en una parcela para que los habitantes de zonas boscosas puedan participar de este mecanismo y recibir algún estímulo por coadyuvar a acrecentar y preservar los bosques. De manera que mediante el uso de plataformas aéreas no tripuladas podemos apoyar a los habitantes de diferentes regiones a automatizar estos procesos”, indicó.
El académico del Laboratorio de Sistemas Autónomos Ligeros del Centro de Investigación en Ciencia Aplicada y Tecnología Avanzada (CICATA), Unidad Querétaro, detalló que a los drones se les montan cámaras térmicas y multiespectrales.
Las imágenes que con ellos se obtienen, ayudan a detectar árboles, determinar la estructura tridimensional de éstos y del terreno, y mediante el uso de técnicas alométricas, relacionarlo con el carbono contenido en ellos.
Agregó que, a partir del Tratado de París, firmado por unos 170 países, mediante el cual se busca implementar medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, especialistas politécnicos se han enfocado al monitoreo de sistemas naturales con propósitos de conservación.
Vía: Excelsior