¿La Inteligencia Artificial se te hace algo muy lejano?, ¿te parece un tema poco comprensible y que sólo expertos pueden entenderlo?
Las películas de ciencia ficción retratan a la inteligencia artificial (IA) como una máquina que destruirá al ser humano, aunque en realidad es una industria que ayuda cada vez más a la sociedad.
Así que si piensas que la IA es para unos cuantos o para los más ricos, estás equivocado.
A continuación, te presentamos algunos ejemplos de la vida cotidiana en los que la IA está presente:
Cuando haces compras
Las soluciones basadas en IA, como los chatbots pueden ayudar en gran medida a los consumidores de empresas tradicionales, por ejemplo en el sector retail, gigantes como eBay y H&M los utilizan para evaluar a los clientes y proporcionarles lo que están buscando dentro.
Si tú buscas un pantalón te encontrarás con cientos, pero un chatbot de IA te puede proporcionar recomendaciones basadas en color, marca, precio y más.
Asimismo, la IA te puede ayudar en todo el proceso de compra al informarte de la llegada de nuevos productos, procesar órdenes o encontrar la tienda más cercana.
Cuando te comunicas
En el sector telecomunicaciones la atención al cliente es un servicio complejo, pero la IA puede lidiar con el manejo de preguntas repetitivas de los clientes. Cuestiones muy bien identificadas las puede responder fácilmente un chatbot u otra solución de IA.
En cuanto a tareas como la asistencia con asuntos simples como la interrupción del servicio, actualización del número del contacto o de método de pago, éstas también pueden ser realizadas por la IA.
En todo caso, siempre se puede redirigir al usuario a un operador humano cuando el asunto es demasiado complejo para la IA.
Gmail también utiliza la IA para brindarte una mejor experiencia. A través del aprendizaje automático, Google te sugiere frases antes de que las termines de escribir.
Asimismo, también ofrece un sistema de respuestas sugeridas, con las que ya no es necesario escribir para responder un correo. Gmail te da algunas opciones para contestar y tú solo tienes que dar clic en la que prefieras.
Sin duda algunos de los que más sorprenden son los asistentes virtuales como Siri, Alexa y Cortana, pues son capaces de respondernos gracias al procesamiento de lenguaje natural y programas de reconocimiento de voz. Además de que, con el tiempo, aprenden de sus usuarios para dar mejores respuestas a sus inquietudes.
Cuando quieres hacer crecer tu dinero
Invertir es un trabajo duro y, además, solitario. ¿Qué pasaría si la tecnología te ayudara a saber cómo y cuándo invertir y qué decisiones tomar?
Imagina que pudieras saber, con algoritmos e IA, qué activos compran otros inversores con un perfil similar al tuyo. Los asesores financieros profesionales tienen seguramente sus herramientas para conseguir esta información, pero ¿qué pasa con los inversores particulares o que no tienen acceso a estos asesores financieros?
Existe un roboadvisor (T-Advisor) para inversores autónomos que, con herramientas basadas en la IA y machine learning, proporciona datos de calidad para sus usuarios.
Cuando quieres viajar
También las aerolíneas han implementado la IA con chatbots para responder solicitudes de los clientes sobre la ubicación de sus equipajes a través de un sistema de rastreo y emparejamiento. Lo mejor de todo es que se puede conversar con el chatbot a través de WhatsApp o Facebook Messenger.
Así que todos los días utilizamos la IA y no nos damos cuenta. ¿Quieres más ejemplos?
Netflix haciéndote recomendaciones, Waze sugiriéndote la ruta óptima para llegar a tu destino, Uber Eats brindándote la comida que quieres a la temperatura que te gusta, o automóviles autónomos que reaccionan a las condiciones cambiantes.
Así que no, la IA no es para unos pocos… está en tu vida y está en todos lados, porque como ya dijo Baltazar Rodríguez, evangelista tecnológico de IBM: “el ejercicio de transformación digital sí tiene que ver con la tecnología, pero lo más importante es que tiene que ver con la manera en cómo se hacen los cambios”.
A muchas personas les ha mejorado la vida, a otras les ahorra tiempo y dinero y lejos está de destruirá al ser humano o de dejarlo sin empleo.