El sector de los productos tecnológicos para el gran público se congrega esta semana en Las Vegas en un contexto de caída continua de sus ingresos debido a la incertidumbre política, la fortaleza del dólar y la reducción del ritmo de ventas de teléfonos inteligentes, que a pesar de todo siguen siendo su locomotora.
Al comenzar la exhibición del Consumer Electronics Show (CES) en Las Vegas, los organizadores predijeron que los ingresos del sector continuarán reduciéndose en 2017 por cuarto año consecutivo.
Los consumidores de todo el mundo gastarán 929 mil millones de dólares en teléfonos inteligentes y otros dispositivos, frente a los 950 mil millones de 2016, según la asociación estadounidense del sector, la Consumer Technology Association (CTA).
El director de estudios de mercado de la CTA, Steve Koenig, reveló este martes en Las Vegas, antes de la apertura del salón anual CES, que este pronóstico se basa en la “incertidumbre tras la elección de (Donald) Trump y el Brexit”, la votación a favor de la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
“Este ambiente de incertidumbre seguramente va a impactar en el gasto de los consumidores, en las inversiones de las empresas y en las de los gobiernos”, sostuvo Koenig.
En su opinión, la fortaleza del dólar también constituye “un importante impacto”, al reducir las cantidades gastadas en tecnología en otras divisas, así como las bajadas de precios para algunos productos, como las tabletas.
Los ingresos del sector siguen dependiendo en gran medida de los teléfonos inteligentes, que este año representarán un 47 por ciento de los gastos en electrónica del gran público a escala mundial, aunque su crecimiento, tanto a nivel de volúmenes de venta como de ingresos, empieza a moderarse.
“El teléfono inteligente está en el centro del universo del consumidor de tecnología”, apuntó Koenig.
Vía El Financiero