Aunque los teléfonos de gama alta de distintas compañías prometen resistencia al agua, la especificación de los iPhone es inferior al de otras marcas como Samsung y SONY.
Podemos confirmarlo a citar las especificaciones. Modelos como el iPhone 8, 8 Plus y el X; registran una resistencia IP67; mientras que otros de mayor gama en marcas como Samsung, su principal competidor, entre otros, registran un IP68.
Ese pequeño número hace una diferencia importante que te explicamos a continuación.
Para comenzar, este tipo de especificaciones debe ser avalada por la Comisión Eléctrica Internacional. Bajo ciertas circunstancias de fabricación, las compañías pueden ofrecer ciertas funciones.
Cuando obtienen, por sus características de fabricación una certificación internacional, (IP, por sus siglas en inglés), podemos identificar la protección contra sustancias.
El primer número que le sigue, trata sobre la resistencia a sólidos. Se define entre el 0 y 6. Siendo el último el que más alta resistencia a suciedad ofrece.
Esta especificación protege contra polvo nocivo, lo que ya en forma, es una especificación importante.
El segundo número se refiere a líquidos. En el caso de los iPhone mencionados, se cuenta con una protección tipo “7”; que quiere decir que puede soportar hasta un metro de profundidad por 30 minutos. Esto no quiere decir que deberías nadar con tu smartphone, la protección sobre todo es para salpicaduras y caídas al agua accidentales.
En el caso de los teléfonos con IP68; como algunos Samsung; LG y SONY, entre otros, tenemos una resistencia un tanto mayor. Hasta un metro y medio de profundidad, posiblemente mayor profundidad, por lo que tenemos mejor rendimiento, aunque tampoco los convierte en teléfonos sumergibles necesariamente.
Ahora que lo sabes, ya conoces un poco más lo que significa lo que dicen las especificaciones de tu smartphone.